Los visitantes del estudio de Cacao Design son, en la mayoría de los casos, bienvenidos al colorido y caótico espacio a través de un megáfono. (1) en el entrepiso. Fue un regalo de cumpleaños número 40 para Masa Magnoni, quien fundó el estudio en 2004 junto con Alessandro Floridia y Mauro Pastore, y también es el medio por el cual los creativos solicitan café.
Cacao se encuentra en un patio histórico en la sociable zona Navigli de Milán. "Está rodeado de talleres de artesanos y 'case di ringhiera' tradicionales: viviendas bajas con balcones comunes", explica Magnoni. "Con el 'aperitivo' siendo un ritual obligatorio después del trabajo, no podríamos estar en una mejor ubicación".
Las bebidas calientes mencionadas anteriormente se entregan a través de un gran dispensador de granos de café. (2), que llena el espacio con una leve ráfaga de cafeína que mantiene a los creativos animados. Otras superficies rebosan de libros de colores (3). "Somos grandes consumidores de libros de diseño", explica Pastore. "Siempre son interesantes, a menudo inspiradoras y, a veces, publican nuestro trabajo".
El estudio puede parecer desordenado, pero en realidad está muy organizado, insiste Floridia. "Parece que acaba de explotar una bomba, pero en realidad todo está meticulosamente pensado. Cada objeto tiene su propio lugar, y tenemos cuidado de poner las cosas en su lugar".
Una aventura de regreso a las profundidades del entrepiso recompensa a los visitantes con más gemas ocultas, incluido un implemento de madera tallada grande y ominoso. (4) que resulta ser un arma utilizada por la policía de Zanzíbar. "Me lo dieron mis hijos cuando regresaban de unas vacaciones", dice Pastore. "Ha resultado útil para Cacao Design en nuestras actividades de recuperación de deuda".
Este artículo apareció originalmente en el número 228 de Computer Arts.